Juntos, en lo alto del podio de un Aquatic Center que empezó a vaciarse y a llenarse de nostalgia. Posaron para los fotógrafos, sujetaron el trofeo de mejores nadadores de los Mundiales de Singapur, firmaron autógrafos, sonrieron… Y compartieron espacio en la zona mixta para hablar de lo que fueron ocho días emocionantes. Summer McIntosh sumó cuatro oros (200 estilos, 200 mariposa, 400 libre y 400 estilos) y un bronce (800 libre) en su fallido reto de destronar a Katie Ledecky. “Me llevo muchos aprendizajes, sobre todo en el 800”, dijo. Léon Marchand obtuvo dos oros (200 y 400 estilos) y una plata (relevo 4×100 estilos) después de apostar por un programa más corto para batir el récord del mundo de Ryan Lochte en los 200. Y lo hizo con un tiempo galáctico (1m52s69).
Summer McIntosh y Léon Marchand fueron los mejores nadadores de los Mundiales y desde septiembre se entrenarán juntos con Bob Bowman, ex de Phelps
Juntos, en lo alto del podio de un Aquatic Center que empezó a vaciarse y a llenarse de nostalgia. Posaron para los fotógrafos, sujetaron el trofeo de mejores nadadores de los Mundiales de Singapur, firmaron autógrafos, sonrieron… Y compartieron espacio en la zona mixta para hablar de lo que fueron ocho días emocionantes. Summer McIntosh sumó cuatro oros (200 estilos, 200 mariposa, 400 libre y 400 estilos) y un bronce (800 libre) en su fallido reto de destronar a Katie Ledecky. “Me llevo muchos aprendizajes, sobre todo en el 800”, dijo. Léon Marchand obtuvo dos oros (200 y 400 estilos) y una plata (relevo 4×100 estilos) después de apostar por un programa más corto para batir el récord del mundo de Ryan Lochte en los 200. Y lo hizo con un tiempo galáctico (1m52s69).
“No fue todo perfecto porque nunca lo es, pero es más de lo que esperaba, especialmente el récord. Demuestra que todavía tengo pasión por la natación, quiero seguir. Y también vi muchas cosas que mejorar”, explicó feliz ante una nube de medios galos, que lo siguen como a la estrella que es. Anunció el cuádruple oro olímpico que el próximo año estará en el Europeo de París. Será una locura.
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La canadiense ganó cuatro oros y un bronce por dos oros y una plata (más un récord) del francés
En la última jornada, Marchand ganó con cuatro segundos de margen los 400 estilos (4m04s73) y reconoció que en la braza notó las “piernas entumecidas” porque no llegaba demasiado preparado para esta prueba. Se quedó a dos segundos de su plusmarca e hizo el quinto tiempo de la historia. Apenas 30 minutos después, participó en la posta de mariposa en el relevo en el que Francia fue plata. “Lo que viene es emocionante”, reconoce. Marchand prepara un programa ambicioso en Texas, con Bob Bowman, donde a sus habituales cuatro pruebas (200 braza, 200 mariposa, 200 y 400 estilos) quiere sumar el 200 libre y los relevos 4×200 libre y 4×100 estilos. Los Ángeles será una versión más ‘phelpsiana’ de este superdotado .
La fotografía del podio se puede repetir cada día en la Universidad de Texas, donde el exentrenador de Michael Phelps tiene su cuartel general de nadadores, con Marchand, el húngaro Hubert Kos, Shaine Casas y el francés de padre español Rafael Fente. Se unirá a ellos Summer McIntosh. Gente nueva en la oficina. “Estoy emocionado de ver a Summer entrenando con nosotros. Todavía tiene mucho por hacer, y será muy divertido entrenar con ella”, dijo Marchand. “¿Por qué no ir a por seis medallas? Es su decisión. Pero desde la perspectiva del entrenamiento, su rango va des-de los 200 metros hasta los
1.500 metros”, anunció Fred Vergnoux, quien ha llevado durante siete meses a la canadiense.
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En la última jornada, McIntosh ganó con facilidad los 400 estilos (4m25s60), pero en esa prueba hubo una advertencia, y es la china de 12 años Yu Zidi. Acabó cuarta a cinco décimas de la plata, mejorando en tres segundos su marca (4m33s76). ¿Cuánto podrá recortar en dos años cuando se desarrolle y acumule más entrenamiento? Yu Zidi nada las mismas pruebas que McIntosh, de 18 años: 200 mariposa y 200 y 400 estilos. Y participó en los 200 libre, puede añadir el 400.
Preguntas sin respuesta, como el futuro programa de la canadiense. Bowman, en su grupo, también cuenta con fondistas, aunque él está más centrado en los estilos o las pruebas de 100 a 400. McIntosh debe decidir qué hace, si sigue con Vergnoux en la distancia o si, por otro lado, lo fía todo a Bowman, quien la puede llevar también a otro nivel, como ha demostrado. “No lo he conseguido –dijo McIntosh sobre el reto de los cinco oros–, pero eso me da hambre para seguir. Incluso si hubiera conseguido cinco oros, querría más, así soy”, sentenció.
Su límite está lejos. Los biomecánicos le ven mejora en los subacuáticos y en detalles de carrera.
Su voracidad la lleva ahora a Texas. Con Marchand. Bowman tiene en sus manos a dos Phelps. El futuro no se puede dibujar.
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