Uno de los grandes apóstoles de la “visión apocalíptica del cambio climático” como Bill Gates ha dado marcha atrás y se posiciona en contra de la teoría de que se camina sin remedio hacia el fin del mundo.
“Esto no conducirá a la desaparición de la humanidad”, dice
Uno de los grandes apóstoles de la “visión apocalíptica del cambio climático” como Bill Gates ha dado marcha atrás y se posiciona en contra de la teoría de que se camina sin remedio hacia el fin del mundo.
Al efecto de las emisiones de gases de efecto invernadero se sobrepone el aroma del poder que emana la Casa Blanca.
Gates, cofundador de Microsfoft que ha utilizado buena parte de su fortuna en hacer sonar la alarma por la emergencia del calentamiento global, publicó este martes un memorando en su web, con su firma, en el que se aproxima al punto de vista del presidente Donald Trump de que no es para tanto. Rompe así con la alerta roja que este mismo martes hizo sonar la Organización de Naciones Unidas (ONU), ariete que vela por la salud ecológica del planeta.
Lee tambiénFrancesc Peirón

“La gente podrá vivir y prosperar en la mayoría de los lugares de la tierra en un futuro previsible”
La reflexión del multimillonario tecnológico arranca con la perspectiva en cursiva de que “el cataclismo climático diezmará la civilización” en unas pocas décadas. Bajo esa perspectiva fatalista, nada es más importante que limitar la subida global de las temperaturas.
“Afortunadamente para todos nosotros, esta visión es errónea”, frase que Trump y su entorno negacionista se han hartado de repetir. “Aunque el cambio climático tiene consecuencias serias, en particular para la gente en los países más pobres, esto no conducirá a la desaparición de la humanidad”, subrayó en su documento.
“La gente podrá vivir y prosperar en la mayoría de los lugares de la tierra en un futuro previsible”, remarcó.
La transformación de Gates confirma la alineación de los empresario tecnológicos con las líneas marcadas por Trump, sin poner objeción alguna a su programa político. Al contrario, abrazándolo, tal como demuestra la total sintonía entre el presidente y lo que escribió el emprendedor en su web –bajo el epígrafe “notas de Gates”–, como si éste copiara al otro.
“Las perspectivas apocalípticas provocan por desgracia que gran parte de la comunidad climática se centre demasiado en los objetivos de emisiones a corte plazo y está desviando recursos de las cosas más efectivas que deberíamos estar haciendo para mejorar la vida en un mundo en alerta”, añadió.
Solo cuatro años después de publicar su espeluznante libro titulado Cómo evitar un desastres climático, su nuevo texto equivale a una reconversión radical de la manera en que Gates, ya septuagenario y con una fortuna estimada en 122.000 millones de dólares, piensa sobre los desafíos del calentamiento.
Lee también
La conexión entre Trump y Gates va más allá de intereses económicos o políticos
Su reposicionamiento supone un duro golpe contra el trabajo que se realiza para rebajar el impacto del CO2, justo la misma jornada en que António Guterres, secretario general de la ONU, avisó de que se han hecho progresos pero que se va un ritmo lento para evitar el agravamiento de la emergencia.
La conexión entre Trump y Gates va más allá de intereses económicos o políticos. Los dos fueron amigos del pervertido sexual Jeffrey Epstein. De hecho, Gates vio cómo su esposa Melinda French Gates pidió el divorcio al saber de la relación con el hombre que se suicidó en prisión en el 2019 a la espera de juicio por prostitución de niñas.
También es un mazazo porque se pronuncia semanas antes de la reunión de líderes mundiales en Brasil para la cumbre climática anual (CO30). Gates pide que se adopte un punto de vista diferente y una métrica más ajustada. Otras veces iba a la cumbre, esta vez no.
Internacional
