En los once años que el doctor Chivato lleva al frente de la Facultad de Medicina de la Universidad CEU San Pablo, la profesión médica ha vivido una profunda transformación . La irrupción de nuevas tecnologías, el avance del diagnóstico por imagen, la inteligencia artificial o la medicina personalizada han cambiado la forma de ejercer. Pero también ha cambiado la sociedad: el envejecimiento de la población, el aumento de enfermedades crónicas y la creciente carga sobre cuidadores no profesionales han redefinido el escenario asistencial . Frente a estos desafíos, Chivato defiende una formación médica que combine excelencia científica con una profunda vocación humanista.¿Por qué es fundamental apostar por la humanización en la formación médica?Los profesionales sanitarios del futuro se enfrentarán a un entorno marcado por un altísimo desarrollo tecnológico y avances diagnósticos y terapéuticos espectaculares. Sin embargo, no podemos olvidar nuestras raíces. La medicina es una profesión milenaria que, desde Hipócrates, hace 2.500 años, se basa en una relación humana entre el profesional y el paciente. La humanización es, precisamente, ponerse en la piel del otro. Eso es esencial.Ha mencionado a Hipócrates, ¿siguen teniendo un papel sus principios en la educación de los futuros médicos?Hipócrates transformó la medicina en una ciencia. Introdujo avances en diagnóstico y tratamiento, pero, sobre todo, instauró el juramento hipocrático, que sigue siendo clave en la ética profesional. Al adherirnos al movimiento hipocrático, reafirmamos nuestro compromiso con los valores clásicos, sin dejar de lado los avances tecnológicos.¿Qué papel ocupa la humanización en el plan académico de su facultad?En nuestra Facultad, la formación en humanización es un pilar fundamental. No se trata de un añadido, sino de una parte estructural de nuestro modelo educativo.«La formación en humanización es parte estructural de nuestro modelo educativo» Tomás ChivatoContamos con la única cátedra universitaria en España que incorpora un Observatorio de Humanización Sociosanitaria. Desde allí evaluamos los planes de humanización de las consejerías de sanidad y elaboramos documentos de referencia para los profesionales. España está avanzando en este ámbito crucial del cuidado.¿Y a nivel nacional, cómo se está incorporando esta humanización en la educación médica?Las Facultades de Medicina de España, a través de la Conferencia de Decanos, trabajamos de forma conjunta en la formación en ética y comunicación. Apostamos por una docencia centrada en el estudiante, al igual que la medicina debe estar centrada en el paciente.¿Qué diferencia su modelo formativo con respecto a otras universidades?Con más de 90 años de historia y 50 formando médicos, el CEU combina tradición e innovación. Nuestra Facultad ofrece carreras clásicas como Medicina y otras emergentes como Bioinformática o Big Data. Buscamos formar a los mejores profesionales para un entorno en constante evolución.¿Cómo se acompaña al estudiante durante su paso por la facultad?Desde el primer día, cada alumno cuenta con un tutor. Las clases y prácticas se desarrollan en grupos reducidos, lo que permite una docencia personalizada y centrada en el desarrollo integral del estudiante.¿De qué manera integran ustedes la tecnología en la formación médica?Combinamos laboratorios tradicionales con salas de simulación, formación digital, bibliotecas online y herramientas como gafas 3D. La preparación del estudiante y la seguridad del paciente son nuestras prioridades.¿Cuándo comienzan los estudiantes su formación práctica con pacientes?En los primeros cursos se trabajan la teoría y las habilidades comunicativas antes de tener contacto real con pacientes. Siempre digo que no hay una segunda oportunidad para una primera impresión. Después, en hospitales y centros de salud, los estudiantes aprenden de tutores clínicos expertos.¿Disponen de convenios con centros clínicos para las prácticas?Tenemos convenios con instituciones como Vithas, Fundación Hospitalarias, Hospital Nuestra Señora del Rosario, Los Camilos o el Infanta Cristina. Estas alianzas permiten una inmersión real en el entorno clínico desde una etapa temprana.Sala de simulación de la Facultad de Medicina de la Universidad CEU San Pablo abcPreviamente, los estudiantes realizan simulaciones, ¿pero qué aporta este paso previo antes del contacto con pacientes?Los alumnos entrenan previamente en simulación básica, intermedia y avanzada. A partir de septiembre de 2025, contaremos con un hospital de simulación completo. Esto asegura que los estudiantes estén preparados y que el paciente reciba una atención segura.Además de las competencias técnicas, ¿se desarrolla alguna otra?Hoy más que nunca es imprescindible trabajar en equipo: médicos, enfermeros, psicólogos… todos colaboran. También fomentamos la responsabilidad profesional y el razonamiento clínico, fundamentales en la práctica médica.¿Cómo se evalúan hoy en día las competencias prácticas, especialmente en los últimos años del grado?Todos los alumnos deben superar la ECOE, una evaluación nacional de competencias prácticas en diagnóstico, comunicación y ética, entre otras. Se realiza con actores y es obligatoria para ejercer en la Unión Europea.¿Qué percepción tienen los centros sanitarios sobre los médicos que han pasado por sus manos?Recibimos excelentes valoraciones. Se destaca su actitud, comportamiento y capacidad de comunicación afectiva, no solo efectiva. Este es un trabajo que iniciamos desde el primer curso.Además de la docencia, ¿hay espacio para la investigación en el CEU?No solo transmitimos conocimiento, también lo generamos. Nuestro Instituto de Medicina Molecular Aplicada (IMMA) es un centro de excelencia en genómica, proteómica y medicina personalizada. Gracias a él, formamos profesionales con una sólida vocación investigadora e innovadora. En los once años que el doctor Chivato lleva al frente de la Facultad de Medicina de la Universidad CEU San Pablo, la profesión médica ha vivido una profunda transformación . La irrupción de nuevas tecnologías, el avance del diagnóstico por imagen, la inteligencia artificial o la medicina personalizada han cambiado la forma de ejercer. Pero también ha cambiado la sociedad: el envejecimiento de la población, el aumento de enfermedades crónicas y la creciente carga sobre cuidadores no profesionales han redefinido el escenario asistencial . Frente a estos desafíos, Chivato defiende una formación médica que combine excelencia científica con una profunda vocación humanista.¿Por qué es fundamental apostar por la humanización en la formación médica?Los profesionales sanitarios del futuro se enfrentarán a un entorno marcado por un altísimo desarrollo tecnológico y avances diagnósticos y terapéuticos espectaculares. Sin embargo, no podemos olvidar nuestras raíces. La medicina es una profesión milenaria que, desde Hipócrates, hace 2.500 años, se basa en una relación humana entre el profesional y el paciente. La humanización es, precisamente, ponerse en la piel del otro. Eso es esencial.Ha mencionado a Hipócrates, ¿siguen teniendo un papel sus principios en la educación de los futuros médicos?Hipócrates transformó la medicina en una ciencia. Introdujo avances en diagnóstico y tratamiento, pero, sobre todo, instauró el juramento hipocrático, que sigue siendo clave en la ética profesional. Al adherirnos al movimiento hipocrático, reafirmamos nuestro compromiso con los valores clásicos, sin dejar de lado los avances tecnológicos.¿Qué papel ocupa la humanización en el plan académico de su facultad?En nuestra Facultad, la formación en humanización es un pilar fundamental. No se trata de un añadido, sino de una parte estructural de nuestro modelo educativo.«La formación en humanización es parte estructural de nuestro modelo educativo» Tomás ChivatoContamos con la única cátedra universitaria en España que incorpora un Observatorio de Humanización Sociosanitaria. Desde allí evaluamos los planes de humanización de las consejerías de sanidad y elaboramos documentos de referencia para los profesionales. España está avanzando en este ámbito crucial del cuidado.¿Y a nivel nacional, cómo se está incorporando esta humanización en la educación médica?Las Facultades de Medicina de España, a través de la Conferencia de Decanos, trabajamos de forma conjunta en la formación en ética y comunicación. Apostamos por una docencia centrada en el estudiante, al igual que la medicina debe estar centrada en el paciente.¿Qué diferencia su modelo formativo con respecto a otras universidades?Con más de 90 años de historia y 50 formando médicos, el CEU combina tradición e innovación. Nuestra Facultad ofrece carreras clásicas como Medicina y otras emergentes como Bioinformática o Big Data. Buscamos formar a los mejores profesionales para un entorno en constante evolución.¿Cómo se acompaña al estudiante durante su paso por la facultad?Desde el primer día, cada alumno cuenta con un tutor. Las clases y prácticas se desarrollan en grupos reducidos, lo que permite una docencia personalizada y centrada en el desarrollo integral del estudiante.¿De qué manera integran ustedes la tecnología en la formación médica?Combinamos laboratorios tradicionales con salas de simulación, formación digital, bibliotecas online y herramientas como gafas 3D. La preparación del estudiante y la seguridad del paciente son nuestras prioridades.¿Cuándo comienzan los estudiantes su formación práctica con pacientes?En los primeros cursos se trabajan la teoría y las habilidades comunicativas antes de tener contacto real con pacientes. Siempre digo que no hay una segunda oportunidad para una primera impresión. Después, en hospitales y centros de salud, los estudiantes aprenden de tutores clínicos expertos.¿Disponen de convenios con centros clínicos para las prácticas?Tenemos convenios con instituciones como Vithas, Fundación Hospitalarias, Hospital Nuestra Señora del Rosario, Los Camilos o el Infanta Cristina. Estas alianzas permiten una inmersión real en el entorno clínico desde una etapa temprana.Sala de simulación de la Facultad de Medicina de la Universidad CEU San Pablo abcPreviamente, los estudiantes realizan simulaciones, ¿pero qué aporta este paso previo antes del contacto con pacientes?Los alumnos entrenan previamente en simulación básica, intermedia y avanzada. A partir de septiembre de 2025, contaremos con un hospital de simulación completo. Esto asegura que los estudiantes estén preparados y que el paciente reciba una atención segura.Además de las competencias técnicas, ¿se desarrolla alguna otra?Hoy más que nunca es imprescindible trabajar en equipo: médicos, enfermeros, psicólogos… todos colaboran. También fomentamos la responsabilidad profesional y el razonamiento clínico, fundamentales en la práctica médica.¿Cómo se evalúan hoy en día las competencias prácticas, especialmente en los últimos años del grado?Todos los alumnos deben superar la ECOE, una evaluación nacional de competencias prácticas en diagnóstico, comunicación y ética, entre otras. Se realiza con actores y es obligatoria para ejercer en la Unión Europea.¿Qué percepción tienen los centros sanitarios sobre los médicos que han pasado por sus manos?Recibimos excelentes valoraciones. Se destaca su actitud, comportamiento y capacidad de comunicación afectiva, no solo efectiva. Este es un trabajo que iniciamos desde el primer curso.Además de la docencia, ¿hay espacio para la investigación en el CEU?No solo transmitimos conocimiento, también lo generamos. Nuestro Instituto de Medicina Molecular Aplicada (IMMA) es un centro de excelencia en genómica, proteómica y medicina personalizada. Gracias a él, formamos profesionales con una sólida vocación investigadora e innovadora.
En los once años que el doctor Chivato lleva al frente de la Facultad de Medicina de la Universidad CEU San Pablo, la profesión médica ha vivido una profunda transformación. La irrupción de nuevas tecnologías, el avance del diagnóstico por imagen, la inteligencia artificial o la medicina personalizada han cambiado la forma de ejercer. Pero también ha cambiado la sociedad: el envejecimiento de la población, el aumento de enfermedades crónicas y la creciente carga sobre cuidadores no profesionales han redefinido el escenario asistencial. Frente a estos desafíos, Chivato defiende una formación médica que combine excelencia científica con una profunda vocación humanista.
¿Por qué es fundamental apostar por la humanización en la formación médica?
Los profesionales sanitarios del futuro se enfrentarán a un entorno marcado por un altísimo desarrollo tecnológico y avances diagnósticos y terapéuticos espectaculares. Sin embargo, no podemos olvidar nuestras raíces. La medicina es una profesión milenaria que, desde Hipócrates, hace 2.500 años, se basa en una relación humana entre el profesional y el paciente. La humanización es, precisamente, ponerse en la piel del otro. Eso es esencial.
Ha mencionado a Hipócrates, ¿siguen teniendo un papel sus principios en la educación de los futuros médicos?
Hipócrates transformó la medicina en una ciencia. Introdujo avances en diagnóstico y tratamiento, pero, sobre todo, instauró el juramento hipocrático, que sigue siendo clave en la ética profesional. Al adherirnos al movimiento hipocrático, reafirmamos nuestro compromiso con los valores clásicos, sin dejar de lado los avances tecnológicos.
¿Qué papel ocupa la humanización en el plan académico de su facultad?
En nuestra Facultad, la formación en humanización es un pilar fundamental. No se trata de un añadido, sino de una parte estructural de nuestro modelo educativo.
«La formación en humanización es parte estructural de nuestro modelo educativo»
Tomás Chivato
Contamos con la única cátedra universitaria en España que incorpora un Observatorio de Humanización Sociosanitaria. Desde allí evaluamos los planes de humanización de las consejerías de sanidad y elaboramos documentos de referencia para los profesionales. España está avanzando en este ámbito crucial del cuidado.
¿Y a nivel nacional, cómo se está incorporando esta humanización en la educación médica?
Las Facultades de Medicina de España, a través de la Conferencia de Decanos, trabajamos de forma conjunta en la formación en ética y comunicación. Apostamos por una docencia centrada en el estudiante, al igual que la medicina debe estar centrada en el paciente.
¿Qué diferencia su modelo formativo con respecto a otras universidades?
Con más de 90 años de historia y 50 formando médicos, el CEU combina tradición e innovación. Nuestra Facultad ofrece carreras clásicas como Medicina y otras emergentes como Bioinformática o Big Data. Buscamos formar a los mejores profesionales para un entorno en constante evolución.
¿Cómo se acompaña al estudiante durante su paso por la facultad?
Desde el primer día, cada alumno cuenta con un tutor. Las clases y prácticas se desarrollan en grupos reducidos, lo que permite una docencia personalizada y centrada en el desarrollo integral del estudiante.
¿De qué manera integran ustedes la tecnología en la formación médica?
Combinamos laboratorios tradicionales con salas de simulación, formación digital, bibliotecas online y herramientas como gafas 3D. La preparación del estudiante y la seguridad del paciente son nuestras prioridades.
¿Cuándo comienzan los estudiantes su formación práctica con pacientes?
En los primeros cursos se trabajan la teoría y las habilidades comunicativas antes de tener contacto real con pacientes. Siempre digo que no hay una segunda oportunidad para una primera impresión. Después, en hospitales y centros de salud, los estudiantes aprenden de tutores clínicos expertos.
¿Disponen de convenios con centros clínicos para las prácticas?
Tenemos convenios con instituciones como Vithas, Fundación Hospitalarias, Hospital Nuestra Señora del Rosario, Los Camilos o el Infanta Cristina. Estas alianzas permiten una inmersión real en el entorno clínico desde una etapa temprana.
abc
Previamente, los estudiantes realizan simulaciones, ¿pero qué aporta este paso previo antes del contacto con pacientes?
Los alumnos entrenan previamente en simulación básica, intermedia y avanzada. A partir de septiembre de 2025, contaremos con un hospital de simulación completo. Esto asegura que los estudiantes estén preparados y que el paciente reciba una atención segura.
Además de las competencias técnicas, ¿se desarrolla alguna otra?
Hoy más que nunca es imprescindible trabajar en equipo: médicos, enfermeros, psicólogos… todos colaboran. También fomentamos la responsabilidad profesional y el razonamiento clínico, fundamentales en la práctica médica.
¿Cómo se evalúan hoy en día las competencias prácticas, especialmente en los últimos años del grado?
Todos los alumnos deben superar la ECOE, una evaluación nacional de competencias prácticas en diagnóstico, comunicación y ética, entre otras. Se realiza con actores y es obligatoria para ejercer en la Unión Europea.
¿Qué percepción tienen los centros sanitarios sobre los médicos que han pasado por sus manos?
Recibimos excelentes valoraciones. Se destaca su actitud, comportamiento y capacidad de comunicación afectiva, no solo efectiva. Este es un trabajo que iniciamos desde el primer curso.
Además de la docencia, ¿hay espacio para la investigación en el CEU?
No solo transmitimos conocimiento, también lo generamos. Nuestro Instituto de Medicina Molecular Aplicada (IMMA) es un centro de excelencia en genómica, proteómica y medicina personalizada. Gracias a él, formamos profesionales con una sólida vocación investigadora e innovadora.
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