La nueva meta de gasto militar acordada para Estados miembros de la OTAN –un 3,5% del PIB para defensa y un 1,5% adicional para seguridad– ha generado tensiones internas en la Alianza Atlántica tras conocerse que España podría no cumplir las exigencias en los mismo términos que el resto de aliados. Mientras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el domingo que España no aumentará el porcentaje del PIB destinado a defensa hasta un 5%, como se había estado barajando hasta este momento, algunos aliados recibieron esta noticia con recelo.La decisión de permitir que España quede fuera del nuevo objetivo de gasto militar marcado por la OTAN ha sido recibida con cierta inquietud en el Reino Unido . Aunque no hay ningún pronunciamiento oficial desde Downing Street, algunas fuentes citadas por la prensa local de forma anónima y analistas lo interpretan como un gesto que pone a prueba la cohesión aliada en un momento de rearme europeo. Desde el ‘think tank’ Royal United Services Institute (RUSI), expertos como Ed Arnold han subrayado que la solidez de la Alianza depende de compromisos claros y sostenibles por parte de todos los miembros. El Gobierno británico de momento mantiene su hoja de ruta: alcanzar el 2,5 % del PIB en defensa en 2027. El ministro de Defensa, John Healey ha reiterado que el país «ya hace una enorme contribución a la OTAN» pero está de acuerdo con la meta de la Alianza Atlántica para 2035.Débil e indefensaLa primera ministra italiana, Giorgia Meloni , da una respuesta indirecta al presidente del Gobierno al señalar que la propuesta actualizada de la OTAN se traduce para todos «en un compromiso de 3,5%» del PIB para defensa y 1,5% para seguridad. «Estos son compromisos importantes que Italia respetará. No dejaremos a Italia expuesta, débil e incapaz de defenderse» , añadió Meloni en el debate en el Parlamento ante el Consejo Europeo del próximo jueves y viernes y la cumbre que se inicia hoy en La Haya. Después, Meloni precisó: «Hemos obtenido llegar al 3,5% en diez años [más 1,5% en seguridad] sin vínculos de aumento anual y con la posibilidad de redefinirlo en 2029. No es un compromiso mayor que el de 2014, cuando estábamos en el 1% del PIB y nos comprometimos a alcanzar el 2%».La primera ministra italiana concluyó afirmando su pleno compromiso con la defensa europea. « Debemos estar dispuestos a hacer más por la seguridad y por Europa , porque ninguna comunidad de Estados puede ser plenamente autónoma si confía su seguridad a otros. Si no sabes defenderte, no decides; no puedes definirte como libre si no decides. Siempre he apoyado un pilar europeo capaz de sostener al estadounidense», observó.En los medios italianos tuvo amplia repercusión, acogida con sorpresa, la supuesta excepción o «descuento» del secretario de la OTAN, Mark Rutte, al jefe del Ejecutivo español. La agencia ANSA contactó con fuentes de la Alianza, que aclararon: «El acuerdo no contempla excepciones». La nueva meta de gasto militar acordada para Estados miembros de la OTAN –un 3,5% del PIB para defensa y un 1,5% adicional para seguridad– ha generado tensiones internas en la Alianza Atlántica tras conocerse que España podría no cumplir las exigencias en los mismo términos que el resto de aliados. Mientras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el domingo que España no aumentará el porcentaje del PIB destinado a defensa hasta un 5%, como se había estado barajando hasta este momento, algunos aliados recibieron esta noticia con recelo.La decisión de permitir que España quede fuera del nuevo objetivo de gasto militar marcado por la OTAN ha sido recibida con cierta inquietud en el Reino Unido . Aunque no hay ningún pronunciamiento oficial desde Downing Street, algunas fuentes citadas por la prensa local de forma anónima y analistas lo interpretan como un gesto que pone a prueba la cohesión aliada en un momento de rearme europeo. Desde el ‘think tank’ Royal United Services Institute (RUSI), expertos como Ed Arnold han subrayado que la solidez de la Alianza depende de compromisos claros y sostenibles por parte de todos los miembros. El Gobierno británico de momento mantiene su hoja de ruta: alcanzar el 2,5 % del PIB en defensa en 2027. El ministro de Defensa, John Healey ha reiterado que el país «ya hace una enorme contribución a la OTAN» pero está de acuerdo con la meta de la Alianza Atlántica para 2035.Débil e indefensaLa primera ministra italiana, Giorgia Meloni , da una respuesta indirecta al presidente del Gobierno al señalar que la propuesta actualizada de la OTAN se traduce para todos «en un compromiso de 3,5%» del PIB para defensa y 1,5% para seguridad. «Estos son compromisos importantes que Italia respetará. No dejaremos a Italia expuesta, débil e incapaz de defenderse» , añadió Meloni en el debate en el Parlamento ante el Consejo Europeo del próximo jueves y viernes y la cumbre que se inicia hoy en La Haya. Después, Meloni precisó: «Hemos obtenido llegar al 3,5% en diez años [más 1,5% en seguridad] sin vínculos de aumento anual y con la posibilidad de redefinirlo en 2029. No es un compromiso mayor que el de 2014, cuando estábamos en el 1% del PIB y nos comprometimos a alcanzar el 2%».La primera ministra italiana concluyó afirmando su pleno compromiso con la defensa europea. « Debemos estar dispuestos a hacer más por la seguridad y por Europa , porque ninguna comunidad de Estados puede ser plenamente autónoma si confía su seguridad a otros. Si no sabes defenderte, no decides; no puedes definirte como libre si no decides. Siempre he apoyado un pilar europeo capaz de sostener al estadounidense», observó.En los medios italianos tuvo amplia repercusión, acogida con sorpresa, la supuesta excepción o «descuento» del secretario de la OTAN, Mark Rutte, al jefe del Ejecutivo español. La agencia ANSA contactó con fuentes de la Alianza, que aclararon: «El acuerdo no contempla excepciones».
Reino Unido lanza dudas e Italia consolida su compromiso militar
La nueva meta de gasto militar acordada para Estados miembros de la OTAN –un 3,5% del PIB para defensa y un 1,5% adicional para seguridad– ha generado tensiones internas en la Alianza Atlántica tras conocerse que España podría no cumplir las exigencias … en los mismo términos que el resto de aliados. Mientras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el domingo que España no aumentará el porcentaje del PIB destinado a defensa hasta un 5%, como se había estado barajando hasta este momento, algunos aliados recibieron esta noticia con recelo.
La decisión de permitir que España quede fuera del nuevo objetivo de gasto militar marcado por la OTAN ha sido recibida con cierta inquietud en el Reino Unido. Aunque no hay ningún pronunciamiento oficial desde Downing Street, algunas fuentes citadas por la prensa local de forma anónima y analistas lo interpretan como un gesto que pone a prueba la cohesión aliada en un momento de rearme europeo.
Desde el ‘think tank’ Royal United Services Institute (RUSI), expertos como Ed Arnold han subrayado que la solidez de la Alianza depende de compromisos claros y sostenibles por parte de todos los miembros. El Gobierno británico de momento mantiene su hoja de ruta: alcanzar el 2,5 % del PIB en defensa en 2027. El ministro de Defensa, John Healey ha reiterado que el país «ya hace una enorme contribución a la OTAN» pero está de acuerdo con la meta de la Alianza Atlántica para 2035.
Débil e indefensa
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, da una respuesta indirecta al presidente del Gobierno al señalar que la propuesta actualizada de la OTAN se traduce para todos «en un compromiso de 3,5%» del PIB para defensa y 1,5% para seguridad. «Estos son compromisos importantes que Italia respetará. No dejaremos a Italia expuesta, débil e incapaz de defenderse», añadió Meloni en el debate en el Parlamento ante el Consejo Europeo del próximo jueves y viernes y la cumbre que se inicia hoy en La Haya. Después, Meloni precisó: «Hemos obtenido llegar al 3,5% en diez años [más 1,5% en seguridad] sin vínculos de aumento anual y con la posibilidad de redefinirlo en 2029. No es un compromiso mayor que el de 2014, cuando estábamos en el 1% del PIB y nos comprometimos a alcanzar el 2%».
La primera ministra italiana concluyó afirmando su pleno compromiso con la defensa europea. «Debemos estar dispuestos a hacer más por la seguridad y por Europa, porque ninguna comunidad de Estados puede ser plenamente autónoma si confía su seguridad a otros. Si no sabes defenderte, no decides; no puedes definirte como libre si no decides. Siempre he apoyado un pilar europeo capaz de sostener al estadounidense», observó.
En los medios italianos tuvo amplia repercusión, acogida con sorpresa, la supuesta excepción o «descuento» del secretario de la OTAN, Mark Rutte, al jefe del Ejecutivo español. La agencia ANSA contactó con fuentes de la Alianza, que aclararon: «El acuerdo no contempla excepciones».
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