Las inclemencias meteorológicas han acompañado toda la edición de Supervivientes All Stars. Sin embargo, los estragos del huracán Melissa han convertido los Cayos Cochinos en un auténtico «infierno» a horas de la gran final Leer Las inclemencias meteorológicas han acompañado toda la edición de Supervivientes All Stars. Sin embargo, los estragos del huracán Melissa han convertido los Cayos Cochinos en un auténtico «infierno» a horas de la gran final Leer
Hay que jugárselo mucho para vivir lo que se ha vivido en las últimas 48 horas en Supervivientes All Stars. Hay que jugársela mucho para celebrar la final de Supervivientes All Stars —es este jueves— tal y como están los Cayos Cochinos ahora mismo. Hay que jugársela mucho para aguantar en Supervivientes All Stars ante, probablemente, la peor tormenta —provocada por los estragos del huracán Michelle— que se ha vivido en la historia del reality. Pues si queríamos leche, Supervivientes All Stars te da dos tazas.
Tras la expulsión de Adara Molinero anoche en su duelo con Rubén Torres, cuatro son los supervivientes que se la jugarán en la gran final de Supervivientes All Stars: Miri Pérez-Cabrero, Tony Spina, Jessica Bueno y Rubén Torres. Con Miri ya confirmada como finalista tras ganar el juego de líder (con polémica incluida) de anoche, uno de sus compañeros se quedará a las puertas en la expulsión que tendrá lugar el mismo día de la final. Esto debería ser el gran protagonista de la final de Supervivientes All Stars, pero la realidad es que el temporal que está azotando los Cayos Cochinos se va a llevar toda la gloria.
En los 21 años que lleva emitiéndose Supervivientes hay pocas cosas que no se hayan visto ya: robos, huidas, broncas, tormentas, evacuaciones de urgencia, dramas, abandonos, victorias inesperadas, tongos… Sin embargo, pocas veces se ha vivido lo que en estas últimas 48 horas han vivido los supervivientes de Supervivientes All Stars. Un «infierno», en sus propias palabras; «una película de terror», en palabras de Jorge Javier Vázquez. Si el temporal no remite, la final de Supervivientes All Stars tendrá un concursante inesperado y un nuevo reto para las 200 personas que hacen Supervivientes desde Honduras: ¿cómo solventar las terribles inclemencias meteorológicas?
Lo habitual en Supervivientes es que ante grandes tormentas los supervivientes sean evacuados a la playa de juegos donde el equipo cuenta con una serie de cabañas para que pueda descansar el equipo. Se suelen usar cuando algún concursante tiene que retirarse por prescripción médica o cuando el tiempo pone en riesgo su permanencia en la playa. Memorable fue aquella edición en la que los supervivientes tuvieron que pasar varios días en dichas cabañas ante el temporal que estaban sufriendo. Pero… pero esto es Supervivientes All Stars y aquí no hay temporal que valga.
No hubo evacuación, no hubo traslado a una zona más segura, no hubo nada de nada. Los supervivientes han permanecido las últimas 48 horas cubiertos de agua, de rayos, de truenos, de vientos huracanados con solo una lona y algunos, como Miri y Torres, con un kit de lluvia. Desde el pasado jueves los supervivientes se encuentran en Cayo Paloma, uno de los cayos más hermosos de la zona, pero una trampa en condiciones como las que han vivido.
El temporal fue de tal calibre que la playa, debido a la marea y al fuerte oleaje, quedó completamente inundada. Todo era agua alrededor, sobre y bajo ellos. A eso hay que sumarle el impacto y el miedo que supone estar completamente a la intemperie con vientos que doblaban por completo las palmeras, que llegaron a rajar la lona con la que se cubrían y que arrasaba con todo a su paso. Pero todavía hay más. Las imágenes de los relámpagos, del mar completamente descontrolado, del agua bajo sus cuerpos mientras no dejaba de llover y todo en mitad de la noche ponen los pelos como escarpias.
¿Miedo? ¿Quién dice miedo? Ahí aguantaron como auténticos jabatos, incluso entre risas. 48 horas sin comer, pues no tenían absolutamente nada, ni podían salir a pescar, ni podían cocinar arroz porque no hay fuego, ni nada de nada. 48 horas sin dormir, porque ¿quién duerme en esas condiciones? 48 horas de infierno y sin un atisbo de sacarles de ahí porque, señoras y señores, esto es Supervivientes All Stars, no un campamento de verano.
«No os podéis imaginar en estas últimas 24 horas lo que han vivido nuestros supervivientes«, informó anoche Laura Madrueño en Supervivientes All Stars: En Tierra de Nadie. «Estuvo lloviendo todo el día sin parar, en un lugar donde no se han podido refugiar ni hacer fuego. La isla estaba inundada con unos truenos que hacían que retumbara el suelo. Algo extremo para vivir la edición más alucinante. Hoy tenemos rachas de viento huracanadas», añadió Madrueño, tras lo que Jorge Javier Vázquez describía la situación como «una película de terror». «¡Lo que estáis aguantando es una auténtica pasada!», remataba el presentador consciente de que esto ya está a otro nivel.
Otro nivel para ellos y para el equipo de Supervivientes All Stars. Anoche, ante las condiciones en las que se encontraban, podían haber hecho una gala encerrados en la palapa y aquí paz y después gloria. Pues no, el equipo de Supervivientes quiso que hubiera juego de recompensa (uno de los más largos hasta el momento), que hubiera Puente de las Emociones con Jessica Bueno, que hubiera juego de líder, que ganó Miri Pérez-Cabrero, convirtiéndose en la primera finalista, mientras que Tony Spina acabó siendo expulsado por hacer trampas.
Mucho ha aguantado Supervivientes las trampitas del marido de Marta Peñate. No ha habido juego en esta edición de Supervivientes All Stars que Tony no haya sido advertido por Laura Madrueño. Hasta anoche, porque anoche se jugaban mucho. Si Laura Madrueño dice que hay que sostenerse en los asideros de la estructura en la que estaban colocados en medio del agua, uno se agarra a los asideros, no se agarra a la estructura en sí, que obviamente tiene más superficie y resulta más fácil. Pues Tony Spina acabó expulsado y Miri Pérez-Cabrero salvándose de la siguiente expulsión, que será la primera de la gran final de este jueves de Supervivientes All Stars.
Tras la explicación de la presentadora sobre el juego que iban a disputar, los supervivientes comenzaban un juego muy complicado, ya que se sumó el viento, la lluvia y los truenos de la tormenta que está atravesando la isla. Al cumplirse los 2 minutos y 26 segundos, Jessica Bueno era la primera en caer, por lo que el duelo quedaba entre Miri, Tony y Torres. En este momento Madrueño comenzaba a complicar la prueba colocando a los concursantes en el siguiente escalón y la misma presentadora confiesa que la prueba «es una tortura».
Después de 5 minutos, Laura desvelaba que el collar de líder implicaría un privilegio que cambiaría por completo el destino de uno de los concursantes de cara a la final. Los supervivientes dejaban un frenético duelo que ha mantenido la tensión de todos en todo momento. Cumplidos los 8 minutos, la prueba era de un dolor insoportable. «Este juego es criminal», aseguraba Laura Madrueño, la cual sufre con ellos como si fuera ella la que lo estuviera disputando.
Con 12 minutos, los supervivientes hacían una prueba histórica. Sin embargo, finalmente Rubén Torres caía al mar y Tony Spina era eliminado por la errónea colocación sobre la plataforma. Esto ha dejado a Miri Pérez como la ganadora del collar de líder. Por último, Jorge Javier explica a la ganadora del collar de líder el increíble privilegio que supone este nuevo collar tras confirmarles la fecha de la gran final de la edición: «Miri, como líder pasas a la gran final y te libras del primer televoto».
Durante todo el programa de anoche, la lluvia estuvo amenazando, el viento no amainó, incluso hubo partes del programa en las que los concursantes y Laura Madrueño, que parecía estar más en el Everest que en los Cayos, los hicieron calados completamente y, por supuesto, temerosos de que se volviera a liar una como la noche anterior. Pues se la jugaron, ¡vaya si se la jugaron!
De hecho, este jueves se la van a volver a jugar, pues la gran final de Supervivientes All Stars 2 se va a celebrar en Honduras. No habrá aterrizaje en helicóptero en las inmediaciones de Mediaset, ni tampoco Jorge Javier Vázquez recibirá a Laura Madrueño y a los concursantes. No habrá entrega del cheque en plató, ni el abrazo de decenas de familiares. Todo será en los Cayos Cochinos. Supervivientes All Stars se la va a volver a jugar.
Aunque es un equipo que está pendiente de todo y que analiza las condiciones meteorológicas, la época del año en la que están ahora mismo en Honduras es como una caja de bombones: nunca sabes cuál te puede tocar. Aun así, se la van a jugar porque de esto va Supervivientes All Stars.
Televisión // elmundo

