Uno de los detenidos tiene 34 años y tiene la doble nacionalidad franco-argelina. El otro, de 39 años, es francés Leer Uno de los detenidos tiene 34 años y tiene la doble nacionalidad franco-argelina. El otro, de 39 años, es francés Leer
Los dos sospechosos detenidos por el espectacular robo del museo del Louvre, han «reconocido parcialmente» su participación en la sustracción de las ocho joyas de Napoleón y la Emperatriz, según reconoció la fiscal de París Laure Beccuau. Los otros dos asaltantes siguen el paradero desconocido y el botín, evaluado en 88 millones de euros, no ha podido ser recuperado.
«Quiero mantener la esperanza de que las joyas sean encontradas y puedan ser devueltas al Museo del Louvre«, declaró la fiscal en una conferencia de prensa. «Las joyas robada son invendibles hoy en día. Todavía hay tiempo para devolverlas».
Los dos sospechosos detenidos el sábado, residentes en Seine-Saint-Denis (en la periferia norte de París), comparecieron el miércoles ante el juez y admitieron su participación en el asalto, según informó la fiscal, que no reveló su identidad.
Uno de los detenidos tiene 34 años y tiene la doble nacionalidad franco-argelina. Trabajaba como repartidor y tenía antecedentes por robo y por tráfico de estupefacientes. Fue interceptado por la policía el sábado por la tarde en el aeropuerto Chales de Gaulle cuando pretendía tomar un vuelo hacia Argel.
El segundo es de nacionalidad francesa, tiene 39 años, operaba con licencia de taxista y también tenía antecedentes. Los dos serán juzgados por «robo agravado» en noviembre por un tribunal en Bobigny.
Los dos sospechosos fueron identificados gracias a las más de 150 muestras de ADN dejadas durante el asalto a la Galería Apolo del museo del Louvre, usando una plataforma elevadora instalada en una camioneta para alcanzar las ventanas y equipados con chalecos amarillos para hacerse pasar por los obreros que trabajan en la renovación del museo.
Los asaltantes huyeron al cabo de siete minutos con el botín a bordo de «scooters» Yamaha TMAX y cambiaron al parecer de vehículo en un «punto de encuentro» en la periferia de París. «No descartamos que el grupo que planeó el robo estuviera formado por más de cuatro personas«, reconoció la fiscal, que sin embargo desmintió las informaciones sobre una supuesta «complicidad dentro del museo».
Entre las joyas robadas se encuentran el collar del adorno de zafiro de la reina Marie-Amélie y una tiera de la emperatriz Eugenia. En su huida, los ladrones habían dejado caer una novena joya, la corona de la emperatriz Eugénie, con 1354 diamantes y 56 esmeraldas, que fue encontrada rota en las inmediaciones del museo y tendrá que ser restaurada.
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