Gracias a Màrcia Cisteró, en el teatro ya no hay papeles pequeños. La actriz barcelonesa, miembro habitual de la compañía La Perla 29 de Oriol Broggi y de los montajes de Albert Arribas, sabe otorgar a cualquier papel, sea grande o pequeño, toda la dimensión que requiere.
La polifacética actriz recibe el galardón en una velada muy emotiva en el Romea
Gracias a Màrcia Cisteró, en el teatro ya no hay papeles pequeños. La actriz barcelonesa, miembro habitual de la compañía La Perla 29 de Oriol Broggi y de los montajes de Albert Arribas, sabe otorgar a cualquier papel, sea grande o pequeño, toda la dimensión que requiere.
Es por esta versatilidad que el jurado del 51.º premio Memorial Margarida Xirgu decidió otorgar el galardón a la actriz barcelonesa, presente en los escenarios catalanes desde hace tres decenios. La entrega se hizo este lunes en un teatro Romea lleno de compañeros y amigos.
Los directores
Oriol Broggi y Albert Arribas glosaron la figura de la actriz, destacando la profesionalidad y el rigor de su trabajo
Nacida en Barcelona en 1972, y como pasó con Anna Lizaran, la actriz no ha recibido el premio solo por un montaje de esta temporada, sino por cuatro: Tots ocells y A Macbeth song, de Broggi, y Les bacants y Opereta imaginària, de Arribas.
Los dos directores glosaron su figura, destacando la profesionalidad y el rigor de su trabajo, porque como ella misma dijo en una entrevista y Arribas recordó: “En el escenario se ve todo”.
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En el momento de agradecer el premio, Màrcia Cisteró se mostró superada por la nómina de actrices que durante medio siglo han sido reconocidas con el premio Xirgu. Se emocionó en más de un momento, pero salió adelante como la gran actriz que es.
Con su voz profunda, como recordó Broggi, agradeció los éxitos de su carrera a todos los que los han hecho posibles, y al apoyo indoncicional de su familia, con los ojos puestos en su hija, Montsant. Y recordó las palabras que alguien le dijo: “No paséis de puntillas por la vida”. Ella misma se respondió: “Creo que lo estoy consiguiendo”.
Creo que estoy consiguiendo no pasar de puntillas por la vida
Màrcia Cisteró
Como es tradición, la premiada recibió el anillo Xirgu, que cada año está diseñado por un artista diferente. En esta edición, Maria Díez Serrat ha sido la responsable de fundir en esta joya la carrera y la personalidad de Cisteró, a partir de once bolitas de oro que simbolizan los once montajes que más han marcado su carrera.
El jurado está formado por la Federació de Grups de Teatre Amateur de Catalunya (FGTAC) y la revista Núvol, con la colaboración del Ayuntamiento de Molins de Rei, la Fundació Romea y el Institut del Teatre. El anillo Xirgu es una aportación de los mecenes Joan y Sandra Llavina, de Lexus,
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