Rusia ha levantado la auto moratoria que se impuso en 2019 sobre el tratado de desarme INF, un pacto de la guerra fría al que ese año renunciaron tanto Moscú como Washington. Eso significa que Rusia se reserva el derecho a desplegar misiles de corto y medio alcance cuando lo considere necesario, declaró este martes el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Moscú ha levantado la moratoria que se autoimpuso en 2019, después de que EE.UU. y Rusia abandonaran el histórico Tratado INF
Rusia ha levantado la auto moratoria que se impuso en 2019 sobre el tratado de desarme INF, un pacto de la guerra fría al que ese año renunciaron tanto Moscú como Washington. Eso significa que Rusia se reserva el derecho a desplegar misiles de corto y medio alcance cuando lo considere necesario, declaró este martes el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
“Rusia ya no tiene restricciones al respecto, ya no se considera limitada. Por lo tanto, se considera con derecho a tomar las medidas apropiadas si es necesario”, explicó un día después de que el Ministerio de Exteriores anunciara que la moratoria se había retirado.
Si hay despliegues, no se hará público
Según dijo, desde ahora no hay restricciones externas o contractuales para el despliegue de misiles de esta clase en territorio ruso. Pero agregó que no se deben esperar anuncios sobre la instalación de estas armas, ya que este es un tema bastante sensible y cerrado relacionado con la defensa.
El Ministerio de Exteriores argumentó el lunes que las condiciones para mantener la moratoria habían desaparecido debido a las acciones de los países occidentales. Según este departamento, estos países forman y acumulan en las regiones adyacentes a Rusia “capacidades desestabilizadoras de misiles que crean una amenaza directa a la seguridad” para el país.
Esta situación puede llevar a consecuencias perjudiciales para la estabilidad regional y global, incluido el “peligroso estímulo de la tensión” entre las potencias nucleares, añadió el ministerio.
Firmado a finales de la guerra fría
El INF es un histórico tratado de reducción de armas nucleares que EE.UU. y la Unión Soviética acordaron al final de la guerra fría. Lo firmaron en 1987 Ronald Reagan y Mijaíl Gorbachov. El pacto preveía eliminar los que entonces se llamaron “euromisiles”, es decir, misiles balísticos y de crucero, nucleares o convencionales, con un rango de entre 500 y 5.500 kilómetros.
Estados Unidos denunció el tratado en 2018 y en febrero de 2019 lo abandonó. Ese año, como actualmente, el presidente estadounidense era Donald Trump. Su administración argumentó que Rusia había incumplido el INF al construir y desarrollar el misil 9M729 (SSC8, en la nomenclatura de la OTAN). El poder ruso protestó por esta decisión, y aseguró que el alcance del cohete era de 480 kilómetros y no de 500, como fijaba el tratado. Añadió Moscú que era Washington quien incumplía, al haber instalado lanzaderas Mk.41 en Rumanía. Y también se quejó de que Washington no presentara pruebas de sus acusaciones y de que no se mostrase dispuesto a dialogar.
Como respuesta, Moscú decidió suspender las obligaciones contraídas en ese pacto, pero se autoaplicó una moratoria en el desarrollo de sus propios misiles.
Tras unos días de silencio
Sobre el fin de esta moratoria se pronunció el lunes por la noche en al red social X el expresidente ruso Dimitri Medvédev, cuyos comentarios en internet sobre el arsenal nuclear de Rusia enfurecieron la semana pasada a Donald Trump, que como respuesta ordenó recolocar dos submarinos atómicos.
Algunos medios se sorprendieron de que tras el choque con el jefe de la Casa Blanca, Medvédev permaneciera en silencio en redes.
En su línea, el hoy segundo del Consejo de Seguridad de Rusia volvió a cargar contra Occidente. Según él, el levantamiento de la moratoria fue el resultado de la política antirrusa de los países de la OTAN, y avisó de que Rusia dará más pasos tras esta decisión.
Medvédev cree que ahora ha llegado una “nueva realidad”, para la cual todos los oponentes de Rusia deben estar preparados. “Esperen más pasos”, escribió en su página del antiguo Twitter.
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